Elección de un tocadiscos

Los discos de vinilo están viviendo un repunte que hace más habitual verlos en todo tipo de situaciones. Quizás hayas entrado en contacto con ellos en una tienda de música o porque un amigo los ha heredado de un familiar o empezado su propia colección. Sea como sea, pensar en comprar un tocadiscos es cada vez algo más habitual.

Sin embargo, para novatos en la materia puede resultar un tema complicado. No en vano, este soporte se encuentra en el panteón audiófilo y cuenta con múltiples opciones de reproducción. Si necesitas una guía de compra de tocadiscos, sigue leyendo.

El mejor tocadiscos para un equipo básico

Si te fascinan los vinilos pero no quieres complicarte nada a la hora de reproducirlos, te recomendamos un tocadiscos con previo integrado. Podrás conectarlo directamente a unas cajas acústicas activas (por cable o, si el giradiscos lo permite, Bluetooth), y con esos dos elementos ya podrás disfrutar con gran calidad de tus discos de vinilo.

Tocadiscos inalámbrico con cajas activas

Tocadiscos con previo con cajas activas

¿Qué electrónica de sonido necesita un plato?

El sonido que la aguja logra leer en el disco de vinilo cuando este se encuentra en el giradiscos es muy tenue. Por eso, es necesario que la señal vaya directa a un previo de phono que la preamplificará. 

Posteriormente, esta señal puede enviarse a unas cajas activas aunque los amantes de los equipos de sonido a menudo prefieren un equipo completo con preamplificador, amplificador y altavoces pasivos.

Esta señal inicial, tan tenue, es especialmente susceptible de sufrir contaminación acústica o alteraciones. Por eso es importante, para disfrutar del sonido del vinilo con toda su calidad, invertir en un equipo de cierta calidad. Te proponemos estos equipos de sonido completos, ajustados a distintos presupuestos.

Equipos de tocadiscos HiFi completos

Puntos Clave para elegir bien un tocadiscos

A continuación, desarrollaremos las claves que debes conocer antes de elegir el plato que vas a comprar. Recuerda que el oído es un sentido que varía de persona a persona, por gustos y de forma biológica, es algo que está más allá de precios o especificaciones. Por ello, siempre te recomendamos intentar escuchar las piezas del equipo en persona.

En Concerto Audio contamos con una showroom en la que podemos mostrarte, in situ, varios modelos de giradiscos con sus equipos.

Antes de elegir el que quieres, ten en cuenta:

1. Las velocidades

Tocadiscos

En el mundo del vinilo existen tres velocidades:

  • 1 Tercio, o 33 rpm: es la velocidad de los discos de vinilo LP, los más habituales
  • 45 rpm: es la velocidad de los EPs o Singles. Los discos de vinilo más pequeños y con el agujero central de mayor tamaño, por lo que necesitan un adaptador para colocarlos en el plato.
  • 78 rpm: la velocidad de algunas reliquias de vinilo

Los tocadiscos con dos velocidades (33/45 rpm) son muy frecuentes. Los de 78 rpm los más escasos.

Además, ten en cuenta si necesitas que sea de cambio automático o manual. La diferencia es que los tocadiscos automáticos cambian de velocidad con solo darle a un botón, mientras los giradiscos manuales necesitan que cambies de engranaje su correa para hacerlo, lo que supone mayor manipulación técnica. Que sea manual o automático influirá en el precio.

Aguja de tocadiscos

2. Tipo de cápsula

Existen dos grandes tipos de cápsula para tocadiscos: MM y MC. Aunque antes tenían prestaciones más diferenciadas, hoy en día se pueden elegir indistintamente para lograr una gran calidad de sonido. 

Tendrás que tenerlo en cuenta para elegir el previo de phono, ya que hay algunos compatibles con ambas, pero también otros que solo aceptan cápsulas de uno de los dos modelos.

En otro apartado, están las agujas Mono. Aunque lo más habitual actualmente es que los vinilos estén grabados en estéreo, hubo un tiempo (cuando se estaba lanzando la discografía original de The Beatles en este formato, por ejemplo) que encontrar discos en Mono no era tan infrecuente. Si en tu colección abundan este tipo de álbumes, o la centras en ellos, necesitarás una cápsula Mono que marcará la diferencia.

Y recuerda: es habitual que los discos con velocidad 78 rpm sean Mono.

Poniendo un vinilo a un tocadiscos Rekkord

3. ¿Giradiscos con previo o sin previo integrado?

La tecnología ha permitido que muchos tocadiscos cuenten con un previo de phono integrado. De este modo, la señal captada por la aguja se envía directamente a esta electrónica, y el plato se puede conectar sin más intermediarios al equipo de sonido o las cajas activas para reproducirlo. 

La principal contra que le encuentra la comunidad audiófila a los platos con previo integrado es que, en caso de que se quiera mejorar obliga a cambiar todo el aparato resultando más costoso y que permite menos opciones de personalización eligiendo el plato por un lado y el previo por el otro.

Si tu interés es tan solo escuchar vinilos te recomendamos uno con previo integrado. Si disfrutas configurando la electrónica, uno sin él.

Existen también algunos modelos de tocadiscos disponibles con y sin previo de phono, a elección del usuario.

En caso de que adquieras un previo de phono a parte del tocadiscos, recuerda comprobar que es compatible con el tipo de cápsula que monta el plato (MM, MC o Mono).

4. Tracción directa o tracción de correa

Tocadiscos de tracción directa

Hay tocadiscos que cuentan con tracción directa y los que están equipados con tracción por correa. Generalmente, los segundos se consideran más sofisticados al separar el motor del plato, evitando que se traspase la vibración. Si la tracción es directa, el motor hace girar el plato sin intermediarios. Si es de correa, el motor hace avanzar una correa que es la que provoca el giro.

Dado que la señal de audio extraída del vinilo es tan tenue, resulta muy frágil y la vibración del motor podría suponer alteraciones en la misma.

Estos son un ejemplo de giradiscos de tracción directa y otro por correa.

5. Amortiguación por suspensión, alta masa o múltiples plintos

La fragilidad de la señal acústica que ha sido extraída del vinilo insta a los fabricantes a innovar en el diseño para que todo su camino esté libre de alteraciones. Por ello, han ideado tres formas distintas de minimizar la vibración que puede llegar a la señal mientras transita por la cápsula, el brazo y el cableado.

La primera es la suspensión. Los elementos de suspensión, como pies amortiguadores, logran encajar la vibración, reduciendo el impacto que esta pueda tener sobre el tocadiscos en general y sobre la señal en particular.

La segunda opción es la alta masa: fabricar un giradiscos tan pesado que la vibración no sea capaz de moverlo. Los tocadiscos más corpulentos corresponden a este diseño.

Y en tercer lugar, la creación de tocadiscos con varios plintos o pisos, divididos entre sí por amortiguación. De esta forma es posible colocar un elemento en cada uno de los distintos pisos para que la vibración del motor o del platter rotando no afecte en absoluto a la señal.

Aquí puedes ver un ejemplo de cada uno de estos sistemas.

¿Qué giradiscos compro?

Tras conocer todos estos puntos, podrás elegir a conciencia el mejor tocadiscos que entre dentro de tu presupuesto. Asegúrate de que este cuenta con los puntos clave que más te interesan, y que ofrece una buena calidad de sonido. Lo ideal es poder probar en tienda el modelo que te interesa, uno de la misma marca o uno con prestaciones similares para hacerte a la idea de los resultados de tu inversión.

Si necesitas asesoramiento para elegir tu giradiscos, contacta con nosotros escribiendo a concerto@concertoaudio.com.

Producto añadido para comparación.

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